La dermatitis del pañal es una afección común que puede hacer que la piel del bebé esté dolorida, enrojecida, escamosa y sensible. La mayoría de los casos desaparecen con simples cambios de pañal regularmente. La piel de la zona del pañal requiere una protección e higiene adecuadas, dada la incapacidad del infante para controlar sus deseos de orinar y defecar.
La dermatitis del pañal o pañalitis es una dermatitis irritativa de contacto que suele ser muy común entre los 9 y 12 meses, y entre los 12 y 24 meses.
Características de la dermatitis del pañal
Se caracteriza por zonas rojas y descamativas en las áreas húmedas del pañal, sin afectar los pliegues inguinales. Las zonas más afectadas suelen ser los glúteos, el perineo, los genitales, la parte interna de muslos y la cintura.
Esta zona presenta un gran desafío extra para los padres debido a las numerosos pliegues que se encuentran en esta zona, y a la dificultad de la limpieza y control de este microambiente.
En algunos casos, su mal manejo hace que los pacientes presenten heridas que llegan a infectarse y a ser muy dolorosas. Es entonces cuando puede asociarse con un hongo llamado Candida albicans, cuyo aspecto es muy parecido al de la pañalitis, con la diferencia de que presenta pequeñas pápulas alrededor de las zonas rojas.
Esta infección ocurre cuando la irritación se prolonga por más de 3 días sin el adecuado manejo, lo cual ocasiona cambios en la conducta del bebé, como un llanto incontrolable y mucha agitación por estrés. Del mismo modo, se observan cambios en su patrón de alimentación y sueño, que conllevan estrés emocional en el bebé y, por ende, en los padres.
¿Qué causa la dermatitis del pañal?
La dermatitis del pañal está compuesta por muchos factores:
- Humedad prolongada de la piel, ya que causa daños por fricción, altera la función protectora de la piel y conlleva una mayor reacción de los agentes irritantes.
- Contacto con heces y orina. Esto provoca el aumento del pH de la piel, e infecciones asociadas por hongos y bacterias.
- Alergias. Los bebés con piel sensible también pueden desarrollar erupciones. Algunos tipos de detergente, jabones, pañales (o tintes de pañales) o toallitas húmedas para bebés pueden afectar la piel sensible y causar un sarpullido.
¿Cómo se cura la dermatitis del pañal?
Algunos expertos sugieren dejar a su bebé sin pañales durante varias horas al día para que la piel irritada tenga la oportunidad de secarse y «respirar». Esto es más fácil si coloca a su bebé en una cuna con sábanas impermeables o sobre una toalla grande en el piso.
La prevención es la clave para evitar la dermatitis del pañal
Tips para evitar la dermatitis del pañal:
- Cambio rutinario de pañal para prevenir la exposición prolongada a orina y heces.
- Mantener descubiertos los glúteos en la mayor medida posible para evitar la oclusión del pañal.
- Utilizar un pañal nuevo cada vez que el bebé haga sus necesidades.
- Para los recién nacidos, el promedio adecuado para el cambio de pañal es de cada 2 a 3 horas al día. Para bebés más grandecitos, se puede dejar puesto entre 3 y 5 horas.
- Si la piel ya está afectada, evitar friccionar durante la limpieza.
- Bañar al bebé con agua que esté entre 37 y 40 grados Celsius, y utilizar un jabón suave con un pH entre neutro y ácido para cuidar el manto ácido de su piel. Los jabones tradicionales son muy alcalinos, incrementan el pH y reducen el contenido de grasa epidérmica.
- Aplicar cremas o ungüentos que sirvan como barrera para la piel en cada cambio de pañal, de manera que se forme una barrera de protección contra agentes externos. Las cremas se pueden colocar en piel lastimada o lacerada para mantenerla protegida de agentes irritantes como la orina y las heces. No es necesario retirar la crema de la piel para evitar que se lastime más.
En ocasiones se requieren medidas más agresivas, como el uso de corticoesteroides y medicación antimicótica, pero siempre bajo la consulta y recomendación del médico.
Tratamiento en casa
En la mayoría de los casos se puede tratar en casa, solo sigue estos pasos para el tratamiento:
- Aire: la zona del pañal debe mantenerse lo más descubierta posible para permitir que la piel permanezca seca.
- Barrera: existen productos dermatológicos que se utilizan a modo de barrera protectora, como ungüentos y petrolatos. Si es necesario, aplica una capa de crema en cada cambio del pañal. El talco de bebé no ayuda; por el contrario, tu bebé podría llegar a aspirarlo.
- Cuidados de limpieza: es necesaria la limpieza con agua y aceite mineral, pero siempre evitando la fricción. Las toallitas húmedas son una buena herramienta para ayudar con la limpieza sin causar mucha fricción.
- Pañal: hay que cambiar los pañales cada vez que sea necesario.
- Educación: es importante seguir todas las recomendaciones que tu dermatólogo te indique para el mejor cuidado de tu bebé.
¿Cuándo llamar al médico?
En los casos de pañalitis muy recurrente y de difícil manejo, es necesario investigar más a fondo, ya que pudiera ser una pista para diagnosticar condiciones más serias como deficiencia nutricional, síndrome de malabsorción intestinal, anomalías congénitas urinarias o del tracto gastrointestinal.
Dependiendo del tipo de sarpullido que tenga su bebé, el médico puede optar por usar una crema antimicótica o una crema antibiótica, o puede recomendar otros cambios en su rutina de cambio de pañales. A veces, si esos cambios no alivian un sarpullido causado por una reacción alérgica, el médico puede recetar una crema con esteroides suaves durante unos días hasta que desaparezca el sarpullido.
No es un mito que la leche materna sea el mejor alimento para el bebé, ya que entre los muchos beneficios que le ofrece, se ha reportado que además evita la pañalitis, pues logra bajar el pH de las heces del bebé, reduce la actividad enzimática y el contenido de ureasa. Con estas características, existe un menor potencial de irritación.