La depresión posparto se considera de moderada a intensa, sus síntomas pueden presentarse en el 18.4 % de todas las mujeres durante el embarazo y en el 19.2 % de las madres en los 3 meses después del parto. A pesar de la alta frecuencia de los síntomas, sólo del 20 a 40% de las pacientes reciben tratamiento.
Este tipo de depresión es la enfermedad más común en el periparto o puerperio inmediato.
¿Qué causa la depresión posparto?
No se conocen las causas por las que se presenta, pero se considera que la depresión postparto se debe a los cambios en la relación materno-fetal, del eje hipotálamo-hipófisis-adrenales, que es el eje que regula la producción de hormonas, tanto en la madre como en el bebé.
Otra situación a considerar son las alteraciones en el flujo de la sangre en las arterias del útero; unido esto al gran cambio de ritmo de vida con el que se enfrenta la madre después del nacimiento del bebé.
¿Existen factores de riesgo?
Es más frecuente cuando se han padecido problemas depresivos y emocionales antes y durante el embarazo, cuando hay poco apoyo social y familiar, cuando hay mala calidad en las relaciones con la pareja y en caso de eventos negativos durante el embarazo y/o el puerperio.
Menos frecuentemente está relacionado con el status marital, el status socioeconómico y si el embarazo ha sido no planeado o no deseado.
Los síntomas de la depresión en la madre se relacionan mucho con el recién nacido, con la intensidad de las demandas en su atención y cuidado.
Existen dos tipos de trastorno depresivo post parto, la depresión baby-blues y la psicosis posparto.
Tristeza de la maternidad” o “BABY BLUES”
Son síntomas depresivos, alteraciones leves en el estado de ánimo de la madre puérpera.
Estos sentimientos e inquietudes depresivas moderadas pueden verse en el 50-80% de las madres, más frecuentemente en las primerizas.
En general se manifiesta por falta de concentración, ansiedad y tristeza, pero sobre todo por una inestabilidad del humor, con gran tendencia al llanto.
Aparece entre dos y cuatro días después del parto y desaparece o al menos se reducen un poco los síntomas, superada por todos los sentimientos positivos de la maternidad, de forma espontánea y sin secuelas; más o menos en un período de dos semanas después del parto, sin ningún tipo de tratamiento.
¿Cuánto tiempo dura la depresión posparto?
Es difícil decir cuánto tiempo dura la depresión posparto. Algunos casos duran una semana y otros pueden durar meses. Los médicos recomiendan tratar la depresión posparto desde el principio. Si no se trata adecuadamente puede persistir durante meses e incluso años.
Los síntomas de la depresión postparto son similares a los de una depresión en cualquier otro momento de la vida, agravados por los cambios en el cuerpo y la nueva responsabilidad como madre. Entre los síntomas podemos mencionar:
- Tristeza
- Sentimientos de desesperanza y de minusvalía
- Lentitud de movimientos
- Ansiedad
- Cambios en el apetito (exceso o falta de apetito).
- Deseos de aislarse o la sensación de soledad extrema.
- Desinterés en cuidar de sí misma.
- Falta de interés en las actividades.
- Irritabilidad.
- Falta de energía.
- Pensamientos recurrentes, relacionados con muerte, suicidio o hacerse daño.
- Dificultad para dormir, insomnio o sueño excesivo.
- Dificultad para concentrarte.
- Problemas de memoria severos.
- Síntomas físicos varios —molestias digestivas, dolor de cabeza u otras partes del cuerpo que no desaparecen.
- Sentimientos de culpa.
- Baja autoestima.
- No disfruta actividades que antes le daban placer.
- Falta de motivación.
- Dificultad para llevar a cabo sus tareas diarias.
Otros síntomas se relacionan con la actitud o los sentimientos hacia el bebé:
- Tiene dificultad para establecer el apego con su bebé o le cuesta relacionarse con él.
- No quiere estar a solas con el bebé porque no se siente capaz de cuidarlo.
- Tiene resentimientos hacia el bebé. Lo culpa por su situación o piensa en lastimarlo.
- Se preocupa demasiado por el bebé, hasta el punto de que su sola presencia le causa estrés.
- Se arrepiente de su embarazo y el nacimiento del bebé.
Estos todos suenan como pensamientos muy extremos, pero son comunes y no pasan de ser pensamientos. Por lo general no se concretan, pero sí pueden evolucionar o ser una complicación de la depresión postparto.
Psicosis posparto
Se caracteriza por cambios psicológicos graves que se presentan generalmente en las 2 semanas después del nacimiento. La mujer tiene alucinaciones, agitación, oye voces, pierde la relación emocional con el mundo y requiere hospitalización de la madre, para dar tratamiento y evitar riesgos al niño y a la madre.
La depresión puede asociarse con trastornos en el embarazo. En la madre, puede presentarse dificultad en la ganancia de peso, poca asistencia al control prenatal y es más frecuente el abuso en el uso de drogas y en el bebé, pueden presentarse patologías como el parto pretérmino, bajo peso al nacer, restricción de crecimiento intrauterino y trastornos en la frecuencia cardíaca fetal.
La mujer experimenta sentimientos de temor y puede creer y sentir que no está capacitada para ser madre y que no va a poder realizar esta función en forma adecuada. Se siente como “mala madre” y que no puede satisfacer adecuadamente las necesidades y requerimientos de su bebé. La madre puede tener sentimientos obsesivos e impulsos de querer hacer daño a su bebé.
El haber tenido problemas durante el parto y/o dificultades para establecer la lactancia, puede reforzar los sentimientos depresivos y hacer que cada vez se sienta más triste y cansada.
Debido a que las expectativas sociales y personales en cuanto al cuidado del recién nacido son muy altas y que se considera que todas las mujeres “saben” qué es lo que se tiene que hacer en relación con la atención del bebé.
Se ha encontrado que la depresión es menor en las mujeres que reciben ayuda de mujeres de mediana edad en el cuidado de su bebé en el posparto.
TRATAMIENTO
Debes consultar a tu médico e indicarle lo que te esta pasando. La depresión posparto o periparto puede tratarse con educación psicológica para la paciente y sus familiares, tratamiento psico-farmacéutico y psicoterapia.
Debe recomendarse a la mujer que:
- Pida ayuda con las tareas domésticas, mandados y cuidado del bebé.
- Busque alguien con quien hablar sobre sus sentimientos.
- Hable con otras mamas sobre sus inquietudes y sentimientos.
- Esté la mayor parte del tiempo acompañada.
- Mantenga una dieta equilibrada.
- Hable con su terapeuta, médico o consejero.
- Encuentre tiempo para ella misma.
Se ha encontrado que los hijos de madres depresivas pueden presentar en el futuro alteraciones en el desarrollo de sus capacidades de aprendizaje y cognitivas; además de sus habilidades emocionales. En el caso de los bebes puede verse una dificultad en la comunicación visual y verbal, problemas con el sueño y la lactancia.