«Las acciones hablan más que las palabras.» ¿Cuántas veces has escuchado eso en tu vida? Cuando estén tratando de hablar contigo, o cuando estés tratando de decirles algo, deja de hacer lo que estás haciendo, concéntrate en ellos, ponte a su nivel y míralos a los ojos.
Seguro también habrás escuchado «Haría lo que fuera por ellos», «Yo amo con locura a mis hijos», ¿verdad? Cómo ir de aquí a la luna y de la luna a la tierra y regresó más de un millón de veces. ¿Pero realmente tus actos demuestran esto que decimos y escuchamos?
Y como padres, todo lo que queremos hacer es asegurarnos de que se sientan seguros, protegidos y lo más importante, amados.
Entonces, ¿cómo podemos hacer eso, además de decirles que los amamos? ¿Cómo podemos poner nuestro amor en acción, todos los días de manera sencilla y factible?
Aquí te dejamos 15 maneras fáciles de demostrarles a sus hijos que los amas
1. Míralos a los ojos.
Cuando estén tratando de hablar contigo, o cuando estés tratando de decirte algo, deja de hacer lo que estás haciendo, concéntrate en ellos, ponte a su nivel y míralos a los ojos. Verlos de verdad. Présteles toda su atención tanto como pueda.
2. Hagan contacto físico.
Abrázalos, choca los cinco con ellos, acurrúcate con ellos, toma su mano, siéntate en el sofá con ellos, acuéstate con ellos, está cerca de ellos. Hazle saber que estás allí. Deja que compartan su afecto contigo. ¡Sus abrazos y besos son los mejores!
3. Felicítelos. Refuerzo positivo
Hágales saber que están haciendo un buen trabajo con algo, lo maravillosos que son. sea específico con sus elogios. Haz cumplidos a lo largo del día. Desarrolle su confianza en sí mismos y enséñeles a amarse a sí mismos. Eso se enseña primero en casa.
4. Agradéceles
Hazles saber que los aprecias cuando te escuchan, cuando son amables con su hermano, cuando se han disculpado por algo. Agradécele por ser el gran niño que es. Ayúdalos a sentirse validados y bien consigo mismos.
5. Siéntate y lee con ellos.
Pasen juntos tiempo de lectura de calidad. Permítales elegir cualquier libro que quieran. Charle sobre la historia sobre la marcha. Pregúnteles quién es su personaje favorito o qué es lo que más le gustó. Comparte también lo que te gustó. Siempre busque oportunidades para conocerse mejor.
6. Haga que la hora de dormir sea un momento especial.
Repasen el día juntos antes de irse a dormir. Pregúnteles cuál fue su parte favorita de su día y comparta el suyo. Conéctese antes de que se dirijan al país de los sueños. Pequeños compromisos como este les permitirán a sus hijos saber que siempre pueden hablar con usted.
7. Priorice el tiempo uno a uno.
Si tiene más de un hijo, tenga en cuenta que debe programar una cita individual de vez en cuando con cada hijo. El tiempo todos juntos es genial, pero ese tiempo uno a uno es difícil de conseguir. Es probable que esto abarque desde planear una salida especial juntos hasta simplemente ir a la tienda rápidamente contigo. Pero recuerde, pase lo que pase, ya sea para ir a la tintorería o al zoológico, ¡un tiempo especial a solas con las reglas de mamá!
8. Deja que ellos cocinen contigo.
Las tareas de «niños grandes» como esta, los hacen sentir especiales e importantes. Sé que puede ser difícil cuando te apresuras a juntar algo, pero trata de darles algo que hacer (lavar verduras, remover el tazón, etc.) para ayudarlos a contribuir a la comida. Puede parecer pequeño, pero para ellos es grande.
9. Entusiasmo
Muestra entusiasmo en lo que están hablando, lo que están haciendo, en lo que están trabajando. Muéstrales lo emocionado que está de verlos cuando llegue a casa del trabajo. Déjalos sentir tu amor.
10. Enséñeles, conviértete en su maestro.
Recuerda que ellos son nuevos en este mundo y todo les parece interesante, tienen un nivel de curiosidad muy alto. Preséntales cosas nuevas. Cuéntales sobre tu trabajo. Si parecen interesados en los dinosaurios, consigue un libro para aprender juntos sobre ellos. Háblale sobre diferentes pájaros o árboles que ve en un paseo juntos. Hay muchas oportunidades de enseñanza en todas partes, solo tenemos que ser conscientes de ellas.
11. Haz algo fuera de lo común.
¿Hay algo a lo que a menudo dices «no» a lo que puedas decir «sí» aquí y allá? Quizás no siempre los dejas acurrucarse en tu cama, pero hoy lo puedes hacer. O tal vez no suele darles una golosina después de la cena, pero sí los viernes. Piensa en las pequeñas formas de sorprenderlos y alegrarles los días.
12. Inventen un juego juntos.
Aprovecha su imaginación. Sean creativos juntos. Pasar un tiempo así es una forma excelente y sencilla de vincularse entre sí, además, si recuerdas cómo jugar, puedes agregar esta actividad a tu «caja de herramientas de entretenimiento» para utilizarla más tarde.
13. Pídales que te cuenten una historia.
Darles el control de una historia, mientras que ellos también cuentan con toda tu atención, es como un sueño hecho realidad para los niños. Pueden decir lo que quieran, elegir los personajes, hacer creer, todo mientras ven cómo se iluminan sus ojos en los momentos adecuados … es bastante mágico y hermoso de ver.
14. Motívalos.
Déjalos soñar. Escucha sus sueños. Anímalos a trabajar para conseguirlos. Por ejemplo, ahora mismo, puede que sueñen con ser un astronauta espacial o una princesa de hadas … pero algún día será un sueño de entrar en la Universidad de Nueva York o escribir un libro. ¿Y sabes qué? Creerán que pueden lograrlos, porque siempre los animaste a soñar y establecer metas.
15. Crea tradiciones.
Y hábitos…y rutinas. La previsibilidad (¡con espontaneidad aquí y allá, por supuesto!) Ayudará a su hijo a sentirse amado y cuidado. Las tradiciones familiares especiales, crean recuerdos que durarán toda la vida; son preciosas e invaluables. Tus hijos estarán tan felices de que los hayas iniciado.