¿Qué es la enfermedad de Kawasaki?
La enfermedad de Kawasaki es una enfermedad multisistémica, (afecta múltiples órganos). Se caracteriza por una inflamación generalizada de los vasos sanguíneos (vasculitis).
Aparece generalmente, como un cuadro de fiebre persistente en niños menores de cinco años. Rara vez se presenta en niños mayores de 8 años.
¿Qué causa la enfermedad de Kawasaki?
Actualmente se desconoce la causa, pero se piensa que existe un componente genético que condiciona a una respuesta excesiva del sistema inmunológico, luego de una infección, probablemente viral.
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de Kawasaki?
Los síntomas más frecuentes son:
- Fiebre ≥ 38 °C persistente(usualmente por más de 5 días).
- Enrojecimiento de la conjuntiva o parte blanca del ojo (conjuntivitis), sin secreciones.
- Labios rojos y agrietados.
- Inflamación de la lengua con enrojecimiento (lengua de fresa).
- Exantema o ¨rash¨ en el cuerpo que puede incluir la espalda, pecho, abdomen, brazos, piernas y el área genital.
- Inflamación de ganglios en el cuello.
- Hinchazón y enrojecimiento de la piel en las palmas de las manos y plantas de los pies,
- Irritabilidad (llanto frecuente) y pérdida de apetito.
¿Existe alguna prueba para diagnosticar la enfermedad de Kawasaki?
No hay una prueba específica disponible para diagnosticar la enfermedad de Kawasaki. El diagnóstico implica descartar otras enfermedades que causan signos y síntomas similares, que incluyen:
- La fiebre escarlata (escarlatina), que es causada por bacterias estreptocócicas y produce fiebre, sarpullido, escalofríos y dolor de garganta.
- Artritis reumatoide juvenil
- Síndrome de Stevens-Johnson, un trastorno de las membranas mucosas.
- Síndrome de shock tóxico
- Sarampión
- Ciertas enfermedades transmitidas por garrapatas, como la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas
Diagnóstico
El médico realizará un examen físico y ordenará análisis de sangre y orina para ayudar en el diagnóstico. Las pruebas pueden incluir:
- Análisis de sangre. Los análisis de sangre ayudan a descartar otras enfermedades y controlan el recuento de células sanguíneas de su hijo. Un recuento alto de glóbulos blancos y la presencia de anemia e inflamación son signos de la enfermedad de Kawasaki.
La prueba de una sustancia llamada péptido natriurético de tipo B (BNP) que se libera cuando el corazón está bajo estrés puede ser útil para diagnosticar la enfermedad de Kawasaki. Sin embargo, se necesita más investigación para confirmar este hallazgo. - Electrocardiograma. Se colocan electrodos en la piel para medir los impulsos eléctricos de los latidos del corazón de su hijo. La enfermedad de Kawasaki puede causar problemas con el ritmo cardíaco.
- Ecocardiograma. Esta prueba usa imágenes de ultrasonido para mostrar qué tan bien está funcionando el corazón y puede ayudar a identificar problemas con las arterias coronarias.
¿Cómo se trata la enfermedad de Kawasaki?
El tratamiento de la enfermedad de Kawasaki requiere hospitalización para la administración de un medicamento intravenoso llamado Inmunoglobulina.
También se inicia un medicamento por vía oral llamado aspirina que debe continuar en casa por aproximadamente 6 semanas.
El objetivo del tratamiento es disminuir la inflamación de los vasos sanguíneos, principalmente los del corazón. Este tratamiento debe administrarse dentro de los 10 primeros días de inicio de los síntomas para disminuir el riesgo de complicaciones asociadas a la enfermedad.
Pronóstico
Aunque la enfermedad de Kawasaki generalmente no da problemas más tarde, 10-15% de los niños pueden desarrollar problemas en sus arterias coronarias, incluso después de ser tratados con aspirina y gammaglobulina intravenosa (IGIV).
Por varios años, estos pacientes requieren evaluaciones periódicas (ecocardiogramas), para monitorizar y descartar complicaciones cardíacas.
La mayoría de los niños tienen una recuperación completa y pueden regresar a sus actividades cotidianas en algunas semanas, luego de recibir el tratamiento adecuado.